Imaginemos un living, donde tenemos un aire acondicionado, un equipo de música y una Tv, cada uno de estos dispositivos accionados para encenderse y apagarse con su control remoto de manera individual, personal y directa.

Ahora imaginemos el mismo living en donde con un solo control remoto vamos a encender y apagar dichos dispositivos, vamos a accionarlos aunque no estemos presentes en la habitación donde se encuentran y  vamos a realizar programaciones sobre ellos, como por ejemplo, en el caso de un aire acondicionado, encenderse de forma automática en determinada temperatura a un  horario.

Esto es solo un simple ejemplo de los alcances que la domótica puede aportar en las construcciones actuales y futuras. Si bien suele estar asociado con los hogares, la domótica puede aplicarse desde un edificio, casa, oficina y hasta en una industria.

¿Qué es la domótica?

Si lo buscamos en google nos cuenta que es un:

Conjunto de técnicas orientadas a automatizar una vivienda, que integran la tecnología en los sistemas de seguridad, gestión energética, bienestar o comunicaciones.

Si se lo contamos desde Gralf, nos gusta explicarlo como: la posibilidad de realizar acciones o actividades que hacemos manualmente con cierta frecuencia, de forma automática y sin la necesidad de estar presentes para hacerlo.

A diario, casi sin darse cuenta todas las personas realizan determinadas actividades y acciones dentro del entorno en el que habitan, algunas son tan frecuentes que casi pareciera que se hacen automática. Si decimos: “Encender una luz” es una acción que no necesita pensarse antes de realizarse, se efectúa de forma manual y automática.

Gracias a la tecnología, esto puede ser realmente automático y no necesariamente manual. Llego el momento donde desde un dispositivo celular, por medio de una programación de horarios, las luces pueden encenderse solas, sin accionar la tecla de luz.

Recorriendo un Smart Home

Comienza el día y nos dirigimos a la cocina por un rico desayuno. La cafetera ya se encuentra en funcionamiento, está programada para  accionarse en este horario.

Llega el horario de salida al trabajo y nos retiramos del hogar. A mitad de camino la típica pregunta ¿Apague las luces? Con una configuración de tiempo de apagado o con un simple clic desde nuestro celular solucionamos la duda.

De pronto nos llega una notificación al celular que se está intentando ingresar en el hogar en un horario que no hay nadie en el mismo. Al mismo tiempo en el hogar se acciona una alarma que evita el ingreso de un extraño.

Ya de vuelta, ingresamos en el hogar, al cruzar la puerta  y se encienden las luces de forma automática.

Nos dirigimos al living y el aire acondicionado ya se encuentra encendido en la temperatura ideal. Ya en el sofá, encendemos desde el celular la Tv y comenzamos a buscar el canal de noticias. Cuando nos retiramos del living solo nos queda por decir: “Alexa apagar tv living”.

Al momento de tomar una ducha, el agua ya se encuentra en temperatura, sin necesidad de que el termo eléctrico haya estado encendido todo el día, solo accionándose cuidando es necesario para ayudarnos a reducir el consumo eléctrico.

Encendemos de forma manual la tecla de la luz de la habitación. Accionamos desde el celular el encendido de la Tv. “Alexa apagar luces de habitación”, directo desde la cama sin necesidad de levantarse para apagar manualmente desde la tecla.

¿Hay más inteligencia en el hogar?

Los ejemplos son inalcanzable, y el límite es la imaginación de cada uno. Siempre que hablemos de cualquier equipo  o luminaria que se accione con corriente, podremos automatizarlos. 

Los dispositivos inteligentes, al estar conectado por wifi, permiten reemplazar el accionamiento manual de equipos, por el automático o bien manualmente desde el celular y desde cualquier sitio donde nos encontremos.