Toda instalación eléctrica tiene que estar dotada de una serie de protecciones que la hagan segura, tanto desde el punto de vista de los conductores y los aparatos que se encuentran conectados allí, como de las personas que han de trabajar con ella. Por Ing. Pablo Caruso*
Desde ya sabemos que las instalaciones eléctricas domiciliarias e industriales requieren obligatoriamente protecciones de cortocircuito y electrocución.
Lo que sucede muchas veces es que no contamos con protecciones por alta o baja tensión en el suministro eléctrico. Como así tampoco otros parámetros de suma importancia para la correcta alimentación de los equipos que alimentamos.
Protecciones de alta y baja tensión
Suele suceder que en épocas estivales como la que está comenzando es donde mayor variación en el suministro encontramos, estas variaciones por alta tensión pueden provocar que en un lapso muy corto de tiempo nuestros equipos sufran desperfectos llegando a destruir por completo las etapas de alimentación de estos. En el caso de baja tensión, aquí nos concentraremos en los aparatos que como base de su funcionamiento requieren un motor eléctrico. Ya sea un sistema de refrigeración como cualquier otro aparato que incluya un motor AC en su interior, ante la presencia de baja tensión de línea durante un lapso de tiempo no muy prolongado, este puede quemarse. Para los casos de instalaciones monofásicas, Gralf cuenta con dos modelos de protectores: uno con límites fijos de corte; y otro, configurable según el usuario. Estos son el GF-AB63 y GF-AB63C respectivamente. Para instalaciones trifásicas dispone del modelo GFAB30, también con cortes configurables
Protecciones asimetría, secuencia y falta de fase
En instalaciones trifásicas industriales nos encontramos muchas veces con desbalances en las cargas conectadas en sus fases, esto provoca la variación de las tensiones de fase que conlleva a que podamos tener ciertas tensiones de fase más altas de lo tolerable. Y por ende otras más bajas de lo normal. Otro fenómeno que podemos encontrar es el de falta de una de las fases o cambios en la secuencia de las mismas, cualquiera de estos dos fenómenos puede llevar a la destrucción de máquinas eléctricas conectadas en dicha red. El ya mencionado protector trifásico GF-AB30 también incluye la protección de este tipo de evento
Protecciones de sobre corriente
Como ya sabemos, toda instalación eléctrica posee protecciones de sobre corriente, estas las proveen las llaves termomagneticas o fusibles en el caso de viejas instalaciones eléctricas. Estas protecciones actúan desde 3 a 10 veces la corriente nominal. Muchas veces los equipos conectados son de gran valor y alta sensibilidad a una sobre corriente, en estos casos requerimos una mejor respuesta ante un evento de sobre corriente que podría ajustarse desde 0.1 veces las corriente nominal según sea el caso. Para este caso Gralf ofrece el protector GF-AB63C el cual posee un corte por sobre corriente configurable de hasta 1 ampere de definición. *Director General.
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